Capítulo 10: Caliope y Meta-knight, El caballero galáctico

Caí en medio de la cordillera, de espalda sobre unas rocas puntiagudas, Seika no sabe controlar su fuerza, por lo que su golpe me dejó malherido, arrastrándome logré llegar a un rio, pero estaba tan débil que me desmayé apenas llegué.

Después de lo que me parecieron horas, me desperté en lo que creí que era una cueva, tenía el torso vendado y no me podía mover, me dolía todo, estaba oscuro así que tuve que esperar hasta que se hiciera de mañana.

Cuando me desperté lo primero que sentí fue un ligero peso en mi pecho y un suave pelo que caía sobre él, me empecé a desemperezar y cuando abrí los ojos tenía una toalla húmeda sobre ella, me la quité y observé que había una chica, de 15 años más o menos, con pelo oscuro, tiara roja con gemas negras, una blusa roja y una falda cuadrillé roja y burdeo; ella estaba con su cabeza apoyada en mí, poco tiempo después de que me despertase ella lo hizo…

Buenos días- dijo ella

Hola- fue lo que atiné a decirle

¿Cómo te sientes?- me preguntó

Mejor que en la rivera del rio, por lo menos- contesté, algo extrañado por su amabilidad-por cierto, ¿Cuál es tu nombre?-

Mi nombre es Calíope, ¿y el tuyo?-

Mi nombre es Seikon Miller, gracias por rescatarme allá atrás-

No fue nada, por lo que vi, tú me hubieses ayudado a mí si yo hubiese estado en esa situación-debía referirse a mis cicatrices que me han quedado de combates anteriores, sin contar mi mayor tesoro, La cicatriz que me dio Yami 13 años atrás, la cicatriz más grande y más notoria, sin duda las debió haber visto.

Muy bien, tengo que irme, nos vemos- dije, pero alcancé a caminar metro y medio antes de caer por culpa de mis piernas malheridas

Tienes que quedarte, aún tus heridas no sanan-

Tengo que, mis amigos me están esperando-

¿Amigos?-

Claro, te conté mi nombre, pero no lo que vengo a hacer aquí-

Fue ahí cuando le conté mi historia, todo cuanto había pasado y vivido, y luego me tocó decidir, creí conveniente quedarme allí hasta que me curase completamente, ya que en la campaña de nada sirve un hombre herido, que más que una carga es un peligro.

¿Dónde está mi ropa?-

La estuve cosiendo la noche anterior, pero aún sigue demasiado rota-

No importa, mientras me regenere me tengo que quedar aquí, gracias por coserla-

Ni lo menciones-

Pasé dos días allí, en esa cueva, comía bayas que Calíope salía a buscar por la noche y me bañaba en el rio, era un desafío ir allí, ya que tenía que apoyarme en ella para llegar hasta allá, además, no se podía ver nada de noche, mi ropa estuvo lista el día anterior a irme, mis heridas sanaron y llegó la hora de despedirse…

Hasta luego, Calíope, debo marcharme, fue agradable compartir estos días contigo...- dije mientras tomaba mi chaqueta y me la llevaba a la espalda, mostrando mi camiseta roja con el escudo de los caballeros Almicos.

Antes de que te marches tengo que darte algo- me dijo Calíope, a la vez que ponía unas llaves en mis manos, había una llave de oro, y otra plata, de no más de 15 centímetros cada una- algún día las necesitarás-

Ten, para darte las gracias- le respondí mientras le daba una Cruz celta- llevo tallándolo desde que desperté para dártelo en señal gratitud-

Gracias Seikon, te prometo que...-

¿Nunca te olvidaré?, ¿no sería mejor decir, "nos veremos luego Seikon"?, he andado mucho por el mundo, y puedo decirte que es muy pequeño-

Muy bien, entonces, nos veremos luego, Seikon-

Por Supuesto-

 

Entonces empecé mi viaje de vuelta a la zona de la montaña molida, no fue muy difícil hallarla, ya que habían escombros en las montañas cercanas, así llegué de vuelta a la zona donde había acampado con ellos, cuando llegué Seika se me tiró encima llorando:

¡¡¡Onii-chan!!!, ¿dónde estabas?, ¡lamento mucho lo que te hice!, por favor no te vuelvas a ir tanto tiempo- dijo llorando mientras me abrazaba fuertemente

Si que te extrañó- me dijo Zynaru, mientras miraba como hervía una tetera al fuego

Vaya por dios- respondí

Hueles a perfume de chica- dijo Seika

Podría decirse que eso tiene una buena explicación- contesté sudando la gota gorda

¿Con quién estuviste Onii-chan?- dijo Seika con la típica cara de los ángeles perdidos.

¿Recuerdas cuando utilizaste Lost Angels la última vez?-

¿Eso que tiene que ver?- preguntó ella, con un rostro de total extrañeza

Que cuando me golpeaste con eso me mandaste a volar, caí de espaldas en unas rocas, me arrastré hacia un río y una amable chica me cuidó estos días-

Vaya que suerte- dijo Zynaru-, por cierto, ¿y tu chaqueta no está rasgada?, se supone que si te arrastraste hasta el río tu chaqueta se debía haberse roto.

Calíope la reparó-

¿Calíope?- se metió en la conversación Kaiser

La chica- le respondí

Tuviste suerte de salir vivo- me dijo con cara de… Pocos Amigos

¿Por qué dices eso?- le pregunté Completamente extrañado

Calíope se llamaba la hija de un rey oscuro que Kaiser y yo derrotamos- dijo Zynaru- aunque no la conocimos, podemos llevarnos una impresión aproximada tomando sus ‘’antecedentes’’ familiares

¡¡¡Hey todos!!!¡¡¡Encontré algo!!!- oí un grito a la distancia

Al ir hacia allí, nos encontramos con Cyan, y un espadachín con una máscara

Su nombre es Meta-Knight- nos contó

¡¡¡¿Met?!!!- gritamos Seika y yo al mismo tiempo

¿Seikon?¿Seika?- nos contestó

Años de no oír tu voz Met- dijo Seika exaltada

lo mismo digo, ¿qué les pasó, un día fui al templo y ya no los encontré-

Una Doctora nos liberó del torbellino caótico-

Ummm... eso explica muchas cosas-

Ejem... Meta-knight, recuerda lo que me contaste-

Oh, cierto, Seikon, Seika, y personas que no conozco pero son amigos de ellos, hay 7 espada mágicas repartidas por el mundo, todas ellas forman parte de una superior, la Ultimate Sword, Según me contó su amigo, tenemos un gran problema entre manos, ya que cada rey oscuro es más fuerte que el anterior, solo la luz de la Ultimate Sword es capaz de purificar el corazón de todos ellos, cada espada está custodiada por un guardián que no la dejará ir fácilmente-

Si conseguimos las 7 espadas podremos derrotar al rey oscuro- dijo Kaiser-

Pero ¿en verdad crees que los guardianes nos las van a dar así como así?-dije- obviamente no, ya que su misión es protegerlas de gente que las quiera para que estas espadas no formen la Ultimate Sword y así no cualquiera destruya el mundo o cosas así-

Entonces ¿Cómo los Derrotamos?- preguntó mi hermana

Fácil, armándoles el desmadre- dijo Zynaru

Muy bien, creo que esta es la despedida, nos veremos dentro de dos meses- dije, algo apenado de perder a tan buenos amigos- estos serán los grupos: Zynaru y Sky (que aunque no la he mencionado, estaba presente), Kaiser irá solo, Seika irá Sola, Yo iré Solo y Cyan también irá solo, Met en cambio tiene la libertad de ir a donde quiera-

Gracias Seikon, pero solo pienso retirarme y dejarles el paso libre, la cantidad de energía oscura que está liberando Usui Darknight es tan grande que se está pasando a la dimensión del espejo, y tengo que defender posición allí-

¿Usui?- Preguntó Zynaru

El rey oscuro, yo lo conocí antes de que se volviese rey, pero ahora solo está obsesionado con proteger a su hija y devastar todo cuanto se acerque, ya que perdió a su hijo mayor, lo más probable, si me permiten decirlo, es que el Sombra maldita está muerto- dijo Met, pero ese cambio de tema repentino es lo que él siempre hacía para ocultarnos cosas a Seika y a mí cuando iba al templo-

Fue allí cuando nos separamos, decididos a encontrar las espadas que conformaban al arma definitiva, la Ultimate Sword.